Ante los episodios de sequía cada vez más habituales que vive Cataluña, se pone en marcha el proyecto SENSOREG. Es un proyecto con el apoyo del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalidad de Cataluña financiado a través de la Operación 16.01.01 de Cooperación para la innovación del Programa de desarrollo rural de Cataluña 2014-2020”, así como el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural.
El sector vitivinícola es un gran consumidor de agua, puesto que cada botella de vino requiere una huella hídrica de 720 litros de agua. Aunque el viñedo goza de una alta tolerancia a la sequía, la calidad del fruto puede verse gravemente afectada en los meses más severos de escasez de agua.Catalunya es una zona que sufre episodios de sequía cada vez más extremos que complican la viticultura de secano. La aportación de elementos fertilizantes y de abono a través del agua es también esencial para la producción de las cepas. Por eso las explotaciones optan por aplicar un riego de apoyo a los viñedos que permiten mejorar la calidad de las uvas. La escasez del recurso de agua presenta la necesidad de implementar soluciones tecnológicas y de sistemas que contribuyan al ahorro de agua en proceso de regadío.
Este proyecto, con INNOVI como miembro coordinador, pretende optimizar la gestión del agua en el cultivo del viñedo mediante la digitalización y optimización de todos los procesos productivos, con criterios de eficiencia y ahorro de su uso que asegure la producción anual y mejore la calidad y el potencial enológico de la vendimia. En este sentido, la automatización de los sistemas de riego debe garantizar un ahorro económico, de tiempo y de agua importantes.
El grupo operativo formado por Edetària, Alta Alella, INCAVI e INNOVI insta a implementar las soluciones tecnológicas potencialmente más eficientes para el riego en vid con el objetivo de ayudar al viticultor en la toma de decisiones.
Para ello el proyecto trabajará en una primera fase al conocer el estado hídrico del cultivo, entendiéndolo como conjunto: planta, suelo, meteorología y acciones del viticultor, proponiendo una estrategia de riego, aplicarla y hacerla un seguimiento a largo plazo, obteniendo información agronómica y enológica.
El profundo conocimiento de las tecnologías aplicadas por parte de los centros de investigación y de las empresas participantes que no modifican los procesos productivos habituales, con la gran experiencia en el cultivo del viñedo y elaboración de vinos de calidad de los miembros del grupo operativo, asegura la viabilidad técnica y económica de la innovación.
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