OBSERVATORI INTEL·LIGENT

Coordinado por INNOVI, el Clúster de Materiales Avanzados de Cataluña (Clúster MAV), el centro tecnológico Eurecat, OIMO bioplásticos y la Fundación Instituto Catalán del Corcho (ICSURO), el proyecto SUR3D permitirá desarrollar un material biodegradable, formado por una biobase y polvo de tapones de corcho reciclados para impresión 3D. De esta forma se pretende realizar el reciclaje de los tapones de corcho en el marco de estrategias de economía circular y generar un nuevo material para potenciar la sustitución de productos plásticos de origen fósil en favor de bioplásticos de origen renovable en la industria.

Se trata de un proyecto aprobado por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo (MINCOTUR), así como de la Unión Europea a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Con un presupuesto de 173.458 euros, está subvencionado por el Ministerio en 125.266 euros y se llevará a cabo hasta abril de 2023.

El principal objetivo de este trabajo colaborativo es utilizar tapones de corcho para obtener un nuevo compuesto con un polímero biodegradable apto para la fabricación aditiva con tecnologías de extrusión. De esta forma se pretende promover el reciclaje de los tapones de corcho en el marco de estrategias de economía circular. Con la generación de este nuevo material se busca también potenciar la sustitución de productos plásticos de origen fósil en favor de bioplásticos de origen renovable.

El proyecto SUR3D abre la posibilidad de introducir tapones de corcho utilizados en el mercado como material nuevo con valor añadido. Por tanto, el proyecto contribuirá a reducir la propia huella de carbono del sector corchero y vitivinícola, ya que se ha identificado un residuo y se trabaja porque se convierte en un nuevo producto. El proyecto consistirá en caracterizar y preparar tanto los tapones de corcho utilizados como la matriz polimérica biodegradable para que ambos sean aptos en la fabricación de nuevos materiales.

Durante el trabajo se realizarán pruebas de imprimibilidad con los nuevos materiales resultantes. El proyecto pretende sentar las bases para el futuro desarrollo de determinadas aplicaciones, así como la construcción de prototipos y demostradores de herramientas, objetos, estructuras u otros elementos para el sector vitivinícola y otros sectores de alto valor añadido.

SUR3D, además, quiere demostrar cómo las tecnologías digitales pueden potenciar la economía circular alineando la industria con las políticas europeas actuales (Twin transition). Entre ellas, la fabricación aditiva (AM) aparece como una de las tecnologías más prometedoras. A partir de modelos 3D, AM puede producir piezas personalizadas complejas agregando material "capa por capa".